Los manifestantes se congregaron en el parque Lafayette Square, frente a la residencia presidencial, para rendir homenaje al afroamericano George Floyd, que murió asfixiado durante una detención violenta, y protestar contra la brutalidad policial.
Mientras que en algunas ciudades de EEUU las protestas derivaron en disturbios masivos, la capital del país norteamericano vive una jornada relativamente pacífica. Los manifestantes exigen justicia para Floyd y otras víctimas afroamericanas de la violencia policial, así como la dimisión de Donald Trump.