Se espera que en la cumbre climática de este jueves, el presidente de EEUU intente posicionar al país como líder en los esfuerzos por evitar que las temperaturas del planeta superen los 1,5 grados celsius.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pretende convocar a 40 líderes mundiales, el jueves 22 de abril, para discutir las crecientes amenazas que plantea el cambio climático.
Se espera que Biden intente posicionar a EEUU como líder mundial en la batalla para evitar que las temperaturas globales superen el límite de los 1,5 grados celsius, considerado por diversos científicos como una línea roja para combatir el calentamiento global.
El secretario de Estado, Antony Blinken, advirtió el pasado lunes que EEUU se estaba «quedando detrás» de China en sus esfuerzos por frenar el cambio climático; y señaló que Pekín era el mayor «productor y exportador de paneles solares, turbinas eólicas, baterías y vehículos eléctricos» del mundo, y que poseía aproximadamente un tercio de las patentes de energía renovable del mundo.
«Si no nos ponemos al día, Estados Unidos perderá la oportunidad de moldear el futuro climático del mundo de una manera que refleje nuestros intereses y valores, y perderemos innumerables trabajos para el pueblo estadounidense», agregó.
Pero antes de la cumbre del jueves, EEUU y China, los principales emisores de carbono del mundo, anunciaron que estaban comprometidos a cooperar para combatir el fenómeno climático.
«En el futuro, Estados Unidos y China están firmemente comprometidos a trabajar juntos y con otras partes para fortalecer la implementación del Acuerdo de París», indicaron las potencias en una declaración conjunta el pasado sábado.
Múltiples informes han indicado que Biden reducirá en un 50% los niveles de emisiones de carbono del país para 2030, lo que marcaría un esfuerzo clave para la administración en materia ambiental.
Actualmente, EEUU es responsable de aproximadamente el 15% de las emisiones de carbono, a pesar de representar solo el 4% de la población mundial.
El expresidente de EEUU, Barack Obama, se comprometió en 2015 a reducir las emisiones estadounidenses entre el 26% y 28% en una década, por lo que el anuncio de Biden marcaría un paso aún mayor.
El Acuerdo de París buscaba evitar que la temperatura global se elevara en 2 grados centígrados, pero desde que fue firmado, los científicos han reducido el umbral de catástrofe en medio grado, es decir a 1,5 grados centígrados.
Fuente: Agencia de noticias Anadolu