Iker Casillas no se presentará a las elecciones de la Real Federación Española de Fútbol. El adelanto del proceso electoral y la situación que vive España estarían tras su retirada de la carrera por la presidencia de la institución deportiva.
Así lo confirma el portero del Oporto, que anunció su candidatura en febrero, a través de un comunicado publicado en redes sociales. En este, Casillas asegura que «la excepcional situación social, económica y sanitaria que está sufriendo España» es el principal motivo de su paso atrás, ya que las elecciones, ante el avance de la pandemia, quedan «en segundo plano».
El guardameta considera que no es momento de «dividir», sino de unirse y centrarse en «ayudar a jugadores, clubes y competiciones» y no en unos comicios que «solo desgastarían y harían que enfocasen sus esfuerzos en algo que no es fundamental». Es más, el futbolista se pone a disposición de las principales instituciones deportivas españolas para ofrecer todo su apoyo.Además, el cancerbero del equipo portugués añade que adelantar la fecha de las elecciones hace que el propio proceso electoral no sea «justo, transparente y participativo». No obstante, Casillas no descarta volver a ser candidato a la presidencia de la Real Federación Española en un futuro.
En el caso de recibir la validación del Consejo Superior de Deportes, las elecciones tendrían lugar el 17 de agosto, una vez quede constituida la Asamblea a principios de julio. Los 140 miembros de esta agrupación deciden el nombre del presidente.
Un puesto que parece ser que volverá a caer en Luis Rubiales, presidente de la Real Federación de Fútbol Española desde mayo de 2018.