Lanús sacó un valioso empate 1-1 contra Cruzeiro, y pudo llevarse algo más en su viaje al Estadio Mineirão de Belo Horizonte. La eliminatoria quedó abierta para la revancha del próximo miércoles 30 de octubre, en el Ciudad de Lanús Néstor Díaz Pérez (La Fortaleza). El ganador de esta llave se medirá en la definición de la competencia ante el vencedor del cruce que protagonizan Racing y Corinthians.
El primer tiempo estuvo marcado por una polémica jugada, que hubiera significado el primer gol de Lanús en la eliminatoria. A los 28 minutos, Marcelino Moreno levantó un centro contra el área, hubo un rechazo defensivo y la pelota le quedó a Walter Bou. El ex hombre de Boca Juniors controló en la medialuna seguido de una potente volea que venció a Cássio.
Los futbolistas del Granate dieron rienda suelta a su festejo, pero debieron cortarlo a los pocos segundos por el cobro de un fuera de juego milimétrico de Ramiro Carrera cuando partió el centro de Moreno en la pelota detenida. El encargado del VAR, el colombiano Nicolás Gallo, analizó la acción y validó la decisión tomada por el árbitro, el uruguayo Andrés Matonte, a instancias de su juez de línea.
Los silbidos de los hinchas de la Raposa a su equipo fueron una clara demostración de la floja producción realizada por los dueños de casa. Eso tocó el fuego sagrado de los dirigidos por Fernando Diniz para imponer condiciones en su regreso del vestuario y llegar al 1-0 a los cuatro minutos de la segunda etapa por cortesía de Kaio Jorge, quien aprovechó un rebote largo de Nahuel Losada a un tiro de Mateus Vital.
A pesar de las numerosas bajas por lesión (Nicolás Morgantini, Ezequiel Muñoz, Abel Luciatti, Raúl Loaiza, Toto Salvio, Leonardo Jara y Nery Domínguez), Lanús reaccionó con el paso de los minutos frente a un rival que pagó caro conformarse con la escueta diferencia. La visita hizo figura a Cássio con dos atajadas a Marcelino Moreno en un mano a mano y a Felipe Peña Biafore hasta que llegó el empate a los 72 minutos con un excelente cabezazo cruzado de Ramiro Carrera a la salida de un córner derecho.
El elenco argentino tuvo la victoria en el último cuarto de hora con un testazo desviado de Carlos Izquierdoz, mientras que el anfitrión acarició lo que hubiera sido un inmerecido triunfo, ya que el arquero Nahuel Losada rechazó un remate frontal de Matheus Pereira en el tiempo adicionado.
Vale destacar que los del Sur llegaron a esta instancia después de ser líderes del grupo G en la primera fase, sumando 13 puntos con cuatro triunfos, un empate y una sola derrota (se enfrentaron a Curitiba de Brasil, Metropolitanos de Venezuela y Deportivo Garcilaso de Perú). En octavos de final eliminaron con autoridad al campeón defensor Liga de Quito, con un global de 5-2. Posteriormente, igualaron 1-1 con Independiente Medellín en los cuartos de final y sellaron su clasificación a las semifinales tras imponerse en los penales en Colombia (6-5).
En la vereda opuesta, Cruzeiro llegaba motivado a la serie tras haber dejado en el camino a dos equipos importantes de Sudamérica. En octavos de final superó a Boca Juniors por penales, tras igualar 2-2 en el global. Luego, en cuartos, venció a Libertad de Paraguay con un global de 3-2. Lideró su grupo B con 12 unidades, producto de tres victorias y tres derrotas (compartió zona con Universidad Católica de Ecuador, Alianza FC y Unión La Calera).
El equipo brasileño cuenta con una sólida base de jugadores argentinos en su plantel, como Lucas Villalba, Lucas Romero, Álvaro Barreal, Lautaro Díaz y Juan Dinenno, quienes han sido fundamentales en el buen desempeño del equipo en el torneo. Marcha en la octava posición del Brasileirao con 44 puntos y venía de empatar 1-1 su último encuentro en la liga local ante Bahía.
Fuente: Portal de noticias Infobae