La banda paraguaya de rock, Villagrán celebró en la noche del sábado el décimo aniversario del álbum El Ritmo Subtropical, ocasión en que presentó a su público todas las canciones del disco, en un show realizado en el teatro de la Manzana de la Rivera.
Los fans que llenaron el local, en los primeros cinco temas, que tuvo como bonus tracks, a Vibración, Baby Get Up, Quiero Nirvana (estos dos incluidos en su último disco El Rito), y una especie de enganches de la Fiesta del Caos, levantó la energía del ambiente y no se hizo esperar el pogo y el coro entre tema y tema.
El trabajo discográfico celebrado data del 2014, fue producido por Chávez y co-producido por Villagrán Bolaños. La mezcla se realizó en X Chavez y el masterizado en Carlos Laurenz Mastering.
La grabación lo hicieron entre Agosto de 2013 y Febrero de 2014 en Estudios Súper K, Estudio Verdes, y Elpro Estudios por Matías «Chávez» Méndez, Ricardo Oliveira, y Mauricio Román, en nuestra capital.
No Se Puede Comprar, la canción que da apertura al disco tiene la fuerza para atrapar al oyente y en el show, Villagran supo trasmutar al público, que desde ese momento, comenzó con la comunicación con la agrupación.
El Ritmo Subtropical, fusionó el coro y las ganas de saltar, cantar y el pogo entre un grupo de los presentes. Con Menage A Trois se aumentó el clímax porque los fanáticos no dejaron cantar a Miguel Gonzále, que hasta ese entonces, supo captar la atención del público. Igual situación pasó durante Lagrima, porque la conexión entre banda y público contagió al curioso que fue por primera vez a un show de Villagrán.
Vendrás, tiene por particularidad el sonido fusionado entre el folklore y la acústica, donde Karim Manzur, uno de los guitarrista cantó acompañado del público. Picho, fue el momento de respiro del grupo, que en ese momento, estuvo por una hora seguida en el escenario.
En Mi Gente, el también encargado de las seis cuerdas, Miki Napout le di fuerza al mensaje contestario sobre la situación política y social de aquel 2014. Con Siente, el aire folklórico continuó en un ambiente que estaba cantando y acompañando con las palmas.
En Solo En Sueños, Miguel González, recordó a los queridos y queridas que pasaron a otro plano, que siempre están presentes. Fue el momento más emotivo del concierto.
Reguestone, levantó en saltitos y cánticos a un auditorio que pedía más porque no se cansaba. Sonrisa presentó los riffs de guitarra, pero con un ritmo y sonido que no solo agradó sino que no dejó cantar, como casi toda la noche.
Finalmente, el sonido del agua, que pareció como un mantra para equilibrar las emociones, para finalizar con Zombie, tema especial, que despidió a Villagrán de un público que no se cansó y pidió más, pero que a esa hora, pasada la medianoche, el Ritmo Subtropical ganó las sensaciones de nostalgias a transportó a más de uno en un recorrido de diez años.
Villagrán está integrado por Maxi Bonnín, Karin Manzur, Miki Napout, Mauri Román y Micki González. Y no se debe olvidar que Federico Wagener de Flou, tocó todas las canciones de El Ritmo Subtropical, ya que en aquel año, integró la banda.