El 17 de mayo de 1974 fue constituida la Entidad Binacional ITAIPU para administrar la construcción de una de las mayores centrales hidroeléctricas del mundo. La conformación del Consejo de Administración y del Directorio Ejecutivo se realizó hace 47 años en el Hotel das Cataratas de Foz de Yguazú, Brasil. El objetivo fue edificar y dirigir la usina, cuyas primeras máquinas llegaron a la cantera de obras ese mismo año. El inicio efectivo de las obras fue en enero de 1975.
Diez años después de aquel acto, la hidroeléctrica empezaría a producir electricidad, con el objetivo de impulsar el desarrollo de Paraguay y Brasil. En la actualidad, ITAIPU conserva su liderazgo mundial en generación de energía limpia y renovable. Asimismo, es responsable de suministrar casi el 90% del requerimiento eléctrico del mercado paraguayo y el 15% de todo el consumo brasileño.
La construcción de la represa fue el resultado de intensas negociaciones entre Brasil y Paraguay, iniciadas en la década del 60, cuando ambos países superaron los desafíos diplomáticos, tecnológicos y financieros para erigir la Central Hidroeléctrica de ITAIPU. El 26 de abril pasado se recordó la firma del Tratado de ITAIPU, ocurrido en 1973, instrumento legal para el aprovechamiento del potencial hidráulico del río Paraná.
ITAIPU Binacional es un ejemplo de integración, que ha sabido transformar un conflicto de límites, en el cimiento de una obra monumental que forjó el trabajo armonioso entre dos países, para coadyuvar en el desarrollo de su gente. Una obra que demostró que, cuando el objetivo es bueno, se puede superar la barrera del lenguaje, de la cultura y de la historia, para iniciar un camino fraterno de realizaciones.
Desde el inicio de sus operaciones en 1984, la usina registra una producción acumulada de 2.786.201.607 megavatios hora (MWh). En el aspecto financiero, desde 1989 a abril de 2021, ITAIPU ha transferido USD 11.749,4 millones al Estado paraguayo, por los conceptos de royalties, cesión de energía y pagos a la ANDE.
Biodiversidad y desarrollo sostenible
A través de la gestión eficiente y una planificación constante de acciones, la Central Hidroeléctrica más importante de los países condóminos, Paraguay y Brasil, permite no solo generar energía limpia y renovable, sino que contribuye a mantener la biodiversidad de la región y promover el desarrollo sostenible de la población.
En el apartado medioambiental, la atención de la Entidad va más allá del cuidado de los ríos, corrientes y nacientes que aportan el agua que mueve a la usina. ITAIPU preserva la fauna y flora, gracias a sus reservas, refugios biológicos y al Centro de Investigación de Animales Silvestres (CIASI), los cuales ayudan a proteger a las especies nativas.
En las áreas devastadas por la práctica agrícola, la Binacional encaró acciones de reforestación que permitieron el plantío de millones de mudas de árboles en la franja de protección del embalse.
Además, la Entidad ha ayudado a la relocalización y desarrollo económico de las comunidades indígenas afectadas por la construcción de la represa, con la asistencia técnica y el apoyo financiero correspondientes. Los productores de la zona de influencia también reciben constante apoyo en sus emprendimientos.
De este modo, 47 años después de su creación y en plena emergencia sanitaria por la pandemia del COVID-19, ITAIPU ratifica su compromiso con ambos pueblos, priorizando inversiones que ayuden a fortalecer los servicios de salud y brindar contención social las familias en situación vulnerable.
Fuente: Portal de noticias de la ITAIPÚ Binacional .