La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica, Alicia Bárcena, asegura que la clave para lograr la recuperación tras la crisis causada por la pandemia, es la integración regional. El valor de las exportaciones cayó 13% y las importaciones un 20%.
En 2020 el valor de las exportaciones cayó 13% y las importaciones se redujeron un 20% en América Latina y el Caribe debido a la pandemia del coronavirus y a la crisis económica que esta desató, de acuerdo con un informe presentado este viernes por la la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
“La recesión interna de nuestra región es la peor en 120 años. Nuestra región tiene una caída del crecimiento del -7,7%”, aseguró Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, en una conferencia transmitida de manera virtual. Por eso, la diplomática recalcó la “importancia de la integración regional como un elemento clave para la recuperación económica”.
El informe ‘Perspectivas de comercio internacional para América Latina y el Caribe’ explica que la pandemia profundizó la fragmentación regional, que ya venía desde antes, y llevó a una caída del comercio y de las exportaciones durante el primer semestre de 2020, que llevó a los países de la región intenten recuperarse con la profundización del modelo primario exportador, es decir, basado en la agricultura y las materias primas.
“La COVID-19 interrumpió la producción y el consumo en todo el mundo, y deprimió la demanda global, lo que llevó a una caída del comercio internacional”, dijo Bárcena.
La pandemia profundizó varias tendencias del comercio mundial: la contracción de los volúmenes de comercio de bienes se da por sustitución digital y por nacionalismos y/o regionalismos productivos; la expansión exponencial del comercio de servicios digitales; la reorganización de la producción mundial, y la regionalización de los principales bloques económicos. En palabras de Bárcena, el coronavirus “magnifica la debilidad y caída del comercio de bienes, con excepción de los alimentos y los medicamentos”.
De acuerdo con Bárcena, “las regiones y los países se están yendo hacia adentro para producir sus bienes, no están tanto recibiendo bienes del exterior o exportándolos”. Además, los confinamientos redujeron el comercio de servicios, excepto el comercio de servicios digitales más que en la crisis financiera. El comercio electrónico aumentó 157% entre el primer trimestre y el segundo trimestre de 2020.
La tendencia es “ir a una globalización regionalizada, con un fortalecimiento de los bloques regionales con costos altos para los países en desarrollo. Uno de los riesgos es que los bloques de países desarrollados concentran aún más la producción de bienes avanzados y que el costo de desarrollar cadenas regionales de valores dependerá de las capacidades preexistentes y sobre todo va a requerir, por un lado, infraestructura, logística y coordinación entre los países miembros regionales”, explicó la secretaria de la Cepal.
Fuente: Agencia de noticias Anadolu.