Orlando Castillo, experto en justicia restaurativa en comunicación con Radio Nacional del Paraguay, afirmó que con justicia restaurativa buscan cambiar el abordaje de la criminalidad, especialmente en los adolescentes, que están en un proceso de formación mientras crecen, quienes requieren un acompañamiento distinto al punitivo, el Código Procesal Penal, establece que se debe abordar desde una política educativa, reivindicando a las víctimas, que claman por la Justicia y la reparación de los daños realizados.
Mencionó que “le ponen montos y está demostrado a nivel mundial que muchas víctimas lo que quieren es saber por qué le hicieron y qué es lo que hubo detrás y se han dado casos en nuestro país y el mundo, en que muchas veces las soluciones del conflicto pasaron por abordar la problemática del infractor, que comete el delito y hacer partícipe a la víctima y a la comunidad, aquí se rompe es el tejido social y eso no se repara con enviar alguien a la cárcel”.
Señaló que la justicia restaurativa nace por una necesidad de cambiar la manera de tratar a las personas y a los delitos, mucho tiempo la respuesta fue la prisión y lo que se realizó fue crear las condiciones para mejorar los conocimientos de esos infractores, el 50 % de las personas privadas de libertad reinciden y con la justicia restaurativa pretender modificar ese aspecto y abaratar los costos en la justicia.
Aseguró que trabajando desde esa perspectiva educativa, el porcentaje de reincidencia de los adolescentes disminuyó al 8%, menos de 40 de ellos volvieron a cometer delitos, el programa comienza en el año 2014 y el Ministerio de Justicia, empieza a aplicarlo en el 2016, Itauguá redujo su población de 400 a 120 jóvenes, aplicando un enfoque de justicia diferente de trabajo con los adolescentes y sus familias para reinsertarlos al sistema educativo.
Informó que trabajar desde una forma restaurativa, demostró que reduce los costos y los beneficios son mucho mayores con el Programa de Justicia Restaurativa en Lambaré, de 400 adolescentes que retomaron sus estudios, el 80 % de los jóvenes en conflictos con la Ley no concluyeron ni el sexto grado, abandonaron entre 4º y 5º grados, muchos son analfabetos funcionales o totales.
Aseveró que la única forma de repararlo es creando una sensación de que ese delito, no se volverá a repetir, trabajando con la comunidad, modificando la estructura tradicional de la Justicia, no sólo intervienen los jueces, los fiscales y abogados, sino un equipo multidisciplinario como psicólogos, trabajadores sociales para saber lo que se quebró en una determinada comunidad.