Brasilia.- El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, no podrá participar en la cumbre de países amazónicos prevista para el viernes en la ciudad colombiana de Leticia por motivos de salud y estudia enviar un sustituto de alto nivel o proponer que la cita sea pospuesta, anunciaron fuentes oficiales.
La cumbre fue propuesta por el propio jefe de Estado de Brasil para poder estudiar con los homólogos de los países vecinos medidas conjuntas de combate y prevención a los incendios forestales que se multiplicaron este año en la mayor selva tropical del mundo.
«Por recomendación médica (debido a la preparación para la cirugía a la que será sometido el domingo) el presidente necesitará iniciar una dieta líquida el próximo viernes, lo que hace inviable su viaje a Leticia», aseguró el portavoz de la Presidencia brasileña, Otavio Rego Barros, en una rueda de prensa.
El vocero explicó que la recomendación que impide el viaje fue hecha por los médicos que someterán a Bolsonaro el próximo domingo a una nueva operación en el abdomen, la cuarta desde que fue acuchillado hace cerca de un año, en esta ocasión para la «corrección de una hernia de incisión, que surgió a raíz de las intervenciones quirúrgicas previamente realizadas».
La hernia, detectada por los médicos este fin de semana, es consecuencia de la cuchillada que sufrió Bolsonaro durante la campaña electoral del año pasado.
«El Gobierno estudia que Bolsonaro pueda ser representado por un sustituto de alto nivel (en la cumbre de países amazónicos) o, eventualmente, solicitar que se postergue la cita para que el propio presidente pueda participar», aseguró Rego Barros.
Según el portavoz, el aplazamiento es la posibilidad preferida por el jefe de Estado de Brasil dado a que «desea estar presente por la importancia que le atribuye a ese encuentro».
La cumbre fue anunciada por el propio Bolsonaro la semana pasada tras la reunión que tuvo en Brasilia con el presidente de Chile, Sebastián Piñera, y en la que analizó los efectos que han tenido en todo el mundo los incendios de la Amazonía.
Tras el encuentro bilateral, el gobernante de Brasil anunció la cumbre que se realizará en Leticia, ciudad colombiana situada en los límites de ese país con Brasil y Perú, y manifestó su deseo de reunirse con todos los presidentes de los países de la región amazónica, «excepto al de Venezuela», Nicolás Maduro.
Los cerca de 7 millones de kilómetros cuadrados de la Amazonía son compartidos por Brasil (que posee casi el 70 %), Bolivia, Perú, Colombia, Venezuela, Ecuador, Guyana, Surinam y la Guayana Francesa, este último un territorio de ultramar de ese país europeo.
Bolsonaro afirmó este lunes que, pese a la nueva cirugía y a que necesitará de al menos diez días de reposo, acudirá el 23 de septiembre a la Asamblea General de las Naciones Unidas para poder «mostrarle al mundo» la forma en que Brasil cuida de la Amazonía.
«Quiero hablar sobre la Amazonía», declaró el mandatario, que ha sido acusado por grupos ecologistas y hasta por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, de haber abandonado los programas que el país tenía sobre protección del medioambiente y haber propiciado de esa manera las llamas que aún consumen parte de ese bioma.
Bolsonaro expresó que pretende «mostrarle al mundo, con bastante conocimiento y con patriotismo», que eso no es así, que los planes para el cuidado del medioambiente se mantienen y que los incendios, que son frecuentes en los meses de agosto y septiembre debido a la sequía de la época, han sido usados como «excusa» para atacar a su Gobierno.
Asimismo, repitió su tesis de que existen grandes potencias interesadas en «controlar» la Amazonía, a fin de apoderarse de sus riquezas, y de desconocer la soberanía de los países de la región.
Los incendios en agosto en la Amazonía brasileña fueron los mayores para el mes en esa región. Según el estatal Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE) en agosto se registraron 30.901 focos de incendio, casi el triple de los que se presentaron en el mismo mes de 2018 (10.421).
Entre enero y agosto se registraron en la Amazonía 46.825 focos de incendio, un 11 % más respecto al mismo período de 2018.
La situación generó una fuerte tensión entre Brasil y algunos países europeos, como Francia e Irlanda, que amenazaron con dejar de apoyar el acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea (UE) anunciado en julio si Bolsonaro no cambia su política medioambiental en la Amazonía. EFE